Biodanza

¿Qué es Biodanza?

Fue creada en la década de los años 60 del pasado siglo por el psicólogo y antropólogo chileno Rolando Toro.

Se define como: un sistema de integración humana, renovación orgánica, reeducación afectiva y reaprendizaje de las funciones originarias de vida.

Es un sistema de desarrollo humano, lo cual significa que presupone una finalidad: la integración; una dirección: la armonía; y una acción: el movimiento, que configuran el vínculo amoroso, condición esencial del ser.

Biodanza es un camino de autoconocimiento que de manera sencilla, precisa y profunda nos permite disfrutar del momento pesente y de la conexión con el grupo. Sus herramientas son la música, el movimiento y el silencio. La biodanza es transformadora; trabaja sobre la parte sana de las personas proporcionando el medio para activar todas las cualidades que tenemos en potencia y que a veces hemos olvidado o no las reconocemos en nosotros/as. La Biodanza facilita a las personas más libertad y autentidad en sus vidas.

¿Por qué Biodanza Otra Mirada?

Biodanza «Otra Mirada» es la corriente que crea Vitor Lemelle sobre la biodanza, y tiene que ver con la relación clara y directa que hay entre el movimiento del cuerpo y la existencia humana.

Con una observación atenta y un conocimiento profundo de las categorías de movimiento que se trabajan en biodanza, el movimiento de una persona da mucha información acerca de su existencia en ese momento específico de su vida. Esta información suele resultar clarificadora y sanadora para la persona, y esta es una de las razones por las que la biodanza es terapéutica.

Vitor Lemelle dice: «El objetivo de una sesión de biodanza es facilitar al alumno la recuperación de ‘movimientos que están en potencia’. Es decir, aumentar su grado de libertad en su ‘estar en el mundo’. Cuando somos bebés nos movemos libremente, sin impedimentos, y con el paso del tiempo, los condicionamientos internos y externos van limitándonos y restringiendo nuestros movimientos. Esos movimientos perdidos u olvidados siguen estando en potencia en cada uno de nosotros y se pueden recuperar ampliando de nuevo nuestro registro, lo que incide directamente en cómo nos expresamos en el mundo, en nuestro grado de libertad.

El movimiento es transformador

El poder transformador del movimiento induce vivencias integradoras, experiencias vividas con intensidad en el presente (aquí y ahora), mediante ejercicios y danzas que trabajan 5 línias:

Vitalidad: desarrollar el ímpetu vital y las ganas de vivir la Vida.

Sexualidad: buscar el bienestar y el placer en lo que hacemos.

Creatividad: innovar en la propia vida, ser creativo en cada acto.

Afectividad: potenciar la capacidad de vinculación, cuidado, ternura y solidaridad.

Trascendencia: recuperar la intimidad con uno mismo y con la totalidad.